“Mi obligación con todos los ecuatorianos es hablar con quien sea necesario”, recalcó.

El Presidente Guillermo Lasso reconoció que él fue quien llamó al exmandatario Rafael Correa para buscar un acuerdo legislativo y recalcó que no tiene nada de malo en llamar al líder de un bloque mayoritario que escogió el pueblo ecuatoriano.

Aunque esa llamada no habría resultado bien, puesto que el expresidente Correa indicó que increpó y reclamó a Lasso por sus declaraciones ante la prensa internacional y por su falta de palabra, cuando alcanzaron un primer acuerdo, al inicio de este mandato.

“¿Qué de malo tiene llamar al líder de un bloque mayoritario que escogió el pueblo ecuatoriano? Mi obligación con todos los ecuatorianos es hablar con quien sea necesario”, indicó.

Al final de esta llamada, Lasso manifestó que, luego de esta conversación, concluyó que a Correa “no le interesa el Ecuador y que nada más se interesa por él”.

Por otra parte, fue cuestionado por una promesa que hizo en el 2017, cuando era candidato presidencial y aseguró que haría todo lo posible para reabrir inmediatamente el Aeropuerto de Portoviejo.

Luego de llegar al poder, el Presidente habría notado que esa propuesta no es viable, incluso lo conversó con el Alcalde de Portoviejo.

«Una es la expectativa que uno tiene para cuando llega al cargo y otra es la realidad que se vive que le obliga a educarse».

Fuente: Pichincha Universal, Republica del Banano.